29
Sep.2008
Arrastraba la corriente de un río a una víbora enroscada en una maraña de espinas.
La vio pasar una zorra que descansaba y exclamó:
– ¡Para tal clase de barco, tal piloto!
Personas perversas siempre conectan con herramientas perversas.
Vocabulario:
Maraña: maleza, matorral.
Categoría: Cibercuentos, Fábulas sobre la Tolerancia